Cuando el golpe resuena en el aire El choque de cuernos, un recuerdo de la llamada del acero Recuerdos del lanzamiento de rayos y truenos Tormentas gritando nombres con su boom Los guantes y el cinturón arrojan destellos de luz Aspectos destacados de la magia extraídos de las profundidades del conocimiento Dar fuerza para hacer […]
Tu nombre Gritó a través del campo de batalla Susurrado en la oscuridad del alma Escrito en la frente del sabio Y el corazon del poeta Ardiendo en la mente de los exploradores inventores y locos Tatuado en el tuyo Grabado en letras indelebles Grabado en mi alma Cuando todo lo demás se desvanece Permanece
El cambio puede venir de pequeñas formas, Nota por nota y acorde por acorde. La alegría puede venir de pequeñas formas Al iracundo y al aburrido. Y a los afligidos Y al corazón temeroso le canto Que llames a Life y la escuches responder. Da la vuelta y baja por otro camino Encuentras que tu
Gloria, Forseti, Señor de la Justicia, Mano de Justicia de los Aesir. Hijo de Baldur el brillante sol caído Y su fiel Nanna que lo siguió hasta la muerte, Te quedas quieto pero fuerte al margen De la luz y el ruido de tu pueblo. Tu que eres un guerrero Y comprender la naturaleza de
La muerte me espera cada noche Cabalgo en silencio por la carretera La puerta de Hel está a la vista Déjame dejar esta pesada carga Se que mis dias estan contados Aunque mucho he viajado aquí Nunca podré dormir Cuando despierto cada lagrima Y vería el bosque bañado en fuego Vería los océanos lavarse Para
Los cuervos vuelan sobre mi cabeza y se que tu estas ahi Puedo sentirlo en mi pecho La fuerza que es como un oso Recuerdo como colgabas asi Sobre ese inmenso árbol Sufriendo durante nueve días enteros; La sabiduría nunca es gratuita. Y como tu, llevo un sacrificio y me ayuda y me fortalece. Pasando
¡Gloria, Cazadora de la nieve y el hielo! Salve, esposa de Njord, el dios del mar Que no se comprometería con nadie, Ni vivir en la orilla cerca de las aves marinas En lugar de tus amadas montañas nevadas. Nosotros que luchamos entre las pistas Dejado por tu trineo de invierno, Nosotros, cuyas marcas sangrientas
