CARTA DE INTENCIONES DE LA A.A.H.
(Asamblea Ásatrú Hispanohablante)
Debido a la imperante necesidad de salvaguardar la integridad de las honorables ramas del Ásatrú y las organizaciones que representamos (C.A.L. y T.A.M.C.), hemos creado la A.A.H. (Asamblea Ásatrú Hispanohablante)
Un frente común Iberoamericano cuyo objetivo principal es la mutua colaboración para procurar el sano crecimiento de las futuras agrupaciones Ásatrú, la difusión responsable del contenido relativo a la Tradición y la armonía entre los practicantes.
Habiéndonos reunido como personas libres, en representación de nuestras respectivas asociaciones y realizando un juramento de honestidad bajo las condiciones de invitación, sacamos ante nuestros dioses esta iniciativa, para que sean garantes de los acuerdos aquí tomados.
Sea testigo Tyr, dios del honor, y Forseti, dios de la justicia, la paz y la verdad.
Cabe aclarar que somos conscientes que, al existir algunas diferencias prácticas e interpretativas, consideramos que ese no es ningún impedimento para trabajar juntos por un bien común, pues lo que buscamos es precisamente garantizar la libre práctica y el fortalecimiento individual de cada agrupación.
- Nuestro plan abarca una gaceta virtual informativa, donde con total transparencia, se publiquen las resoluciones o acuerdos que se hayan logrado con la colaboración de todos los involucrados.
- Reiteramos que somos un frente común de defensa de la Tradición Nórdica, por lo tanto, nuestra misión es intervenir e informar.
Por lo anterior, abogamos por la creación de espacios sanos para la expresión de nuestra espiritualidad. Nos comprometemos a trabajar en la creación de proyectos conjuntos por y para el crecimiento orgánico de la espiritualidad nórdica, con el objetivo de extender la comprensión de nuestra tradición como una religión seria y una filosofía de vida.
También tenemos por objetivo la configuración de organismos para promover el reconocimiento de la espiritualidad nórdica por parte de los estados a los que pertenezcan nuestros miembros. Consideramos que es nuestro deber establecer, entre todas las ramas del Ásatrú, vínculos colaborativos en condiciones de equidad, autonomía y respeto. Por ello es que proponemos mesas de diálogo y colaboración entre las diversas agrupaciones de cada rama. Con estas acciones buscamos demostrar que el Ásatrú hispanohablante y portugués es un sendero auténtico e igual de válido que muchos otros.
Tomando como base los parámetros establecidos por la jurisprudencia internacional: desde la Carta Magna de 1215 y ateniéndonos a la Declaración Universal de los Derechos Humanos y a la legislación correspondiente de los países de las asociaciones implicadas, nos comprometemos a luchar incansablemente por la dignificación del mundo Ásatrú de habla hispana, asesorando a nuestros miembros e interesados de manera que puedan practicar su espiritualidad de forma libre y responsable.
La A.A.H. es apolítica surge como una reacción contra toda agrupación que haga apología del odio o manifieste tendencias extremistas ya sea de alineación política de derecha o izquierda. Por supuesto también rechazamos tajantemente, vetamos y denunciamos hasta las últimas consecuencias a cualquier agrupación que fomente el racismo, la xenofobia, la homofobia, la misoginia, la pedofilia y el maltrato animal. Todos los miembros somos personas respetuosas de nuestras leyes nacionales y las del extranjero, por lo que no estamos dispuestos a encubrir o pasar por alto los delitos anteriormente descritos.
Una vez dejado en claro quiénes somos, reiteramos nuestro compromiso con el respeto las libertades, derechos y deberes personales de todos los miembros de la Tradición Nórdica, entendiendo y aceptando la separación de la expresión religiosa de la expresión política de los participantes, tal como exigen las leyes de expresión de culto.
Uno de los preceptos con los que surge la A.A.H. es la confianza. Entre nosotros la palabra tiene valor, de manera que también denunciamos cualquier forma de difamación, injuria o extorsión hacia nuestros miembros o agrupaciones.
Bajo ninguna circunstancia encubriremos a estafadores ni mercaderes que lucran con nuestra Tradición o la utilizan para auto promocionarse; esto no es un juego ni una mercancía, es nuestra fe.
Es importante señalar que la A.A.H. comparte un código de conducta cuyo mayor exponente en la tradición es el Hávamál, el honor es la virtud que más se fomenta y hay muchas más en nuestra práctica cotidiana que se pueden inferir con esta y otras lecturas en el proceso de reconstrucción e interpretación de nuestra Tradición.
La A.A.H. surgió con un diálogo cordial entre diversas agrupaciones (C.A.L. y T.M.C.) cuyo interés primordial es luchar contra la desinformación y la profanación sincrética del Ásatrú, pues así como defendemos las relaciones amistosas entre las diversas ramas, también procuramos que nadie pervierta la esencia de cada una de ellas. Para nosotros, defender nuestra fe no sólo atañe a los intereses de nuestra rama de la Tradición, sino a todo el multiverso del Yggdrasil del cual somos parte.
Nuestra espiritualidad no es una competencia de a ver quién tiene más miembros, sino la invitación a elegir un camino con plena conciencia y en libertad.
Thingvellir Ásatrú México Caribe (T.A.M.C.)
